FACILITAR REQUISITOS DE VISAS

Para los viajeros

Foto: Reuters

China es uno de los países más restrictivos a la hora de aceptar viajeros extranjeros durante la pandemia, incluso aquellos que acuden por motivos laborales se tienen que enfrentar a duras medidas de seguridad. Sin embargo, el gigante asiático ha anunciado que va a empezar a a facilitar los trámites para obtener un visado a todos los ciudadanos extranjeros que se hayan inoculado una de las vacunas producidas en China.
Además, el gigante asiático ya cuenta con su propio pasaporte digital para asegurar que los viajeros procedentes del extranjero están vacunados o han dado negativo en un test de coronavirus. Eso sí, aunque las medidas de seguridad van a seguir siendo importantes mientras la pandemia continúe vigente, China ya se plantea algunas formas de flexibilizar los viajes de ciudadanos de otros países.
Tal y como señala un documento publicado por el propio gobierno, los requisitos para obtener un visado se van a facilitar a aquellos viajeros que se hayan inoculado una de las vacunas desarrolladas en China. De este modo, los extranjeros que visiten China por motivos de trabajo pueden ahorrar tiempo en trámites y papeleo, siempre y cuando demuestren que han sido vacunados por alguno de los antídotos que ha fabricado el gigante asiático.
Gracias a los certificados de vacunación también será posible ingresar en el país sin presentar una prueba negativa de coronavirus. Además, esta nueva normativa no sólo va a flexibilizar los requisitos para obtener visado por cuestiones laborales, también se van a tener en cuenta otros motivos, como asistir a un funeral o acudir al cuidado de un familiar. El resto de viajeros tendrán que seguir los procedimientos actuales.
Las vacunas chinas no han sido aprobadas en los países occidentales, pero sí que se están administrando en algunos territorios de América Latina, Asía y África. Por ejemplo, el antídoto de Sinovac, el primero de este país en ser aprobado, se está suministrando en Uruguay, Chile, Brasil, Indonesia, Laos y Zimbabue.
China espera producir millones de vacunas en un breve período de tiempo, aunque el resto de antídotos que ha desarrollado todavía se encuentran en fase de aprobación.