Kuelap

UN MISTERIO ENTRE PIEDRAS Y NUBES

Escribe: José Cabanillas ncabanillasjo@hotmail.com

Desde aquella empinada cuesta que sale desde el centro poblado El Tingo, ubicado cerca de la ribera del río Utcubamba, puede observarse un majestuoso paisaje verde lleno de arbustos y maleza detrás del cual se levanta un impresionante muro de casi 20 metros de altura que rodea a Kuelap, el complejo arqueológico más importante en la región nororiental del Perú.
La ruta de acceso, por la que transitan numerosos visitantes y pobladores locales, es un impresionante camino sinuoso y afirmado que lleva hasta una ciudadela de piedra, enclavada en la parte más alta del cerro Barreta, ubicado en la margen izquierda del río Utcubamba.
Nuestro guía, un hombre delgado y de apariencia frágil, camina sin embargo a paso ligero y sin dificultad por un pequeño camino, con su espaciosa mochila negra sobre el hombro y una cámara fotográfica en la mano, deteniéndose cada cierto tramo a explicar el propósito de cada espacio construido y la historia detrás de esas estructuras, destacando en cada momento que los chachapoyas eran una civilización muy antigua, anterior a los incas.
Desde el lugar donde ahora nos encontramos, el guía explica con lujo de detalles cada ambiente de la estructura, usos y costumbres, así como el deterioro del mismo por el paso del tiempo y los trabajos actuales que se vienen realizando para la recuperación del sitio arqueológico. Lo que se observa con numerosas construcciones circulares y grabados hechos en piedras de grandes dimensiones, con figuras geométricas, que fueron construidos en pleno apogeo de la cultura chachapoya hacia el siglo VI aC y ocupado finalmente por los incas, luego de muchos intentos de lucha y resistencia, hacia mitad del siglo XVI.
Kuelap está ubicado a casi 3 mil metros de altura y, siendo como es, el testimonio arqueológico más importante en esta parte del país, su extraña y misteriosa ubicación permite diversas interpretaciones a los primeros o asiduos visitantes al lugar. Tal vez por esta razón, al final de un largo camino cada vez más estrecho que se dirige hacia el ingreso del frío corredor principal, se siente un aire fresco y húmedo, pero al mismo tiempo enrarecido, que agudiza aún más los sentidos como si fuésemos observados desde la parte más alta del torreón.
“Estas estructuras colosales se levantan sobre dos plataformas superpuestas en las que se construyó la ciudadela”, explica el guía, indicando al mismo tiempo que Kuelap ocupó inicialmente una extensión aproximada de 450 hectáreas sobre la que se instalaron alrededor de 400 casas circulares de piedra de las cuales, en la actualidad, en el llamado antiguo Pueblo Bajo, quedan alrededor de 300 estructuras de planta circular y 2 pequeños edificios rectangulares.
Ya en la entrada principal a Kuelap se observa, a ambos lados del corredor, descomunales y numerosos bloques de piedras talladas con figuras de animales, serpientes y símbolos de carácter espiritual y religioso que adornan el ingreso que, según explica nuestro guía, al parecer habría estado destinado para uso exclusivo de personajes de alto estatus.
Es por ese mismo ingreso además que se llega al Templo Mayor que era el centro sagrado y ceremonial de mayor importancia en toda la ciudadela. En este lugar se ha podido evidenciar, además, durante los trabajos de recuperación y mantenimiento, restos humanos y ofrendas halladas dentro del recipiente interior del monumento, posiblemente atribuido a diversos rituales de la época.
Desde allí se puede observar también al fondo la Plataforma Circular que por su ubicación está íntimamente conectada al Templo Mayor. Es un espacio amplio con un conjunto de piedras perfectamente distribuidas que parecen adornar el lugar donde posiblemente residía el responsable del cuidado y protección del templo. Es precisamente allí donde hacia el año 1570, aproximadamente, se habría producido una terrible masacre de pobladores seguido de un gran incendio que puso fin a su ocupación.
El camino ahora habilitado y cada vez más estrecho continua por el lado noreste del complejo hasta llegar a una muralla que limita al llamado Pueblo Alto con el resto del asentamiento. Aquí se encuentran tres sectores perfectamente diferenciados a los cuales se accede también por otros dos caminos: uno empinado que conduce hasta el sector norte y central y otro menos largo y pronunciado que conduce hasta el sector sur.
Algunas instalaciones han tenido una marcada influencia inca como es el caso del Callanca, una edificación de piedra de forma rectangular que habría sido usado por los lugareños como centro de almacenamiento de alimentos y suministros para las épocas de escasez, alojamiento para visitantes que llegaban de lejanas regiones o un centro ceremonial y de culto a las deidades. Lo cierto es que algunos datos sobre Kuelap no han podido ser resueltos con absoluta certeza hasta la actualidad como es el caso del traslado de inmensas cantidades de piedras hacia el lugar o el traslado y distribución de agua en la zona.
Aunque no existe un consenso sobre el propósito de estas construcciones, algunas investigaciones realizadas por el arqueólogo peruano Federico Kauffman Doig apuntan a establecer que Kuelap podría haber sido un centro administrativo de la producción agrícola local y un centro ceremonial para realizar rituales propiciatorios a la fertilidad. Esta definición dista mucho de la impresión que la mayoría de visitantes tiene del lugar como una fortaleza militar por el diseño de sus estructuras y la complejidad de sus accesos.
Pero es a partir de las primeras investigaciones de Kauffmann Doig y su esfuerzo por dar a conocer al mundo la importancia de la civilización chachapoya, que se ha logrado recuperar valiosos testimonios y registros arqueológicos importantes sobre esta cultura. Entre estos se puede mencionar a Los Pinchudos, un conjunto de mausoleos en el Gran Pajatén (Parque Nacional del Río Abiseo), mausoleos de Revash en Luya e innumerables momias en la Laguna de Los Cóndores en Leymebamba.
Ya casi al finalizar la tarde, el sol comienza a caer discreto detrás de aquellas verdes colinas, y un viento ligeramente frío y al mismo tiempo sombrío comienza a insinuarse como un delicado manto crepuscular sobre Kuelap. Es la hora de retirarnos descendiendo raudamente por las escalinatas hasta abordar el camino de retorno a El Tingo y luego a Chachapoyas.

云与石之间的库拉普

Simulado 从靠近乌特库巴巴河岸的埃尔廷戈镇中心开始的陡坡上，您可以看到充满灌木丛和灌木丛的雄伟绿色景观，后面矗立着一堵近 20 米高的令人印象深刻的墙，围绕着库拉普，秘鲁东北部地区重要的考古遗址。
众多游客和当地居民沿着这条令人印象深刻的蜿蜒崎岖小路通向位于乌特库巴河左岸巴雷塔山最高处的石头城堡。
我们的导游是个瘦弱的人，但肩上背着宽敞的黑色背包，手里拿着相机，步伐轻快，毫无困难地沿着一条小路走着，每隔几步就停下来解释他的目的。每个建筑空间和这些建筑背后的历史，每时每刻都强调查查波亚是一个非常古老的文明，早于印加人。
导游从我们现在所在的地方，详细解释了每个环境的结构、用途和习俗，以及由于时间的流逝而造成的恶化以及目前正在进行的考古恢复工作。地点。 。我们可以观察到许多圆形结构和用大石头制成的带有几何图形的雕刻，这些建筑建于公元前 6 世纪左右查查波亚文化的鼎盛时期。经过多次斗争和抵抗，到16世纪中叶，最终被印加人占领。
库拉普 (Kuelap) 海拔近 3,000 米，是该国这一地区最重要的考古见证，其奇特而神秘的位置让首次或常来此地的游客有多种解读。也许正因为如此，在一条越来越窄的长路尽头，通向寒冷的主廊入口时，你会感受到一股清新湿润的空气，但同时又变得稀薄，这让你的感官更加敏锐，仿佛置身于冰冷的主廊入口处。从塔的最高处观察。
导游解释说：“这些巨大的建筑矗立在两个重叠的平台上，城堡就建在上面。”同时指出，库拉普最初占地约 450 公顷，上面安装了大约 400 座圆形石屋。目前，在所谓的旧普韦布洛巴霍 (Pueblo Bajo) 中，仍保留着约 300 座圆形建筑和 2 座小型矩形建筑。
在库拉普的主入口处，在走廊的两侧，您可以看到巨大而无数的石块，上面雕刻着动物、蛇的图案以及精神和宗教性质的象征，这些石块装饰着入口，正如我们的导游所解释的那样，显然，会有专门为高地位人物使用的国家。
您也可以通过同一个入口到达大神庙，它是整个城堡中最重要的神圣和仪式中心。在这个地方，在修复和维护工作期间，还可以看到在纪念碑内部容器内发现的人类遗骸和祭品，可能归因于当时的各种仪式.
从这里您还可以看到背景中的圆形平台，由于其位置与大神庙紧密相连。这是一个很大的空间，有一组完美分布的石头，似乎装饰着负责照料和保护寺庙的人可能居住的地方。大约在 1570 年左右，正是在这里，发生了一场对定居者的可怕屠杀，随后发生了一场大火，结束了他们的占领。
这条现已启用且越来越窄的道路沿着建筑群的东北侧继续延伸，直到到达一堵墙，该墙将所谓的普韦布洛阿尔托与定居点的其他部分限制在一起。这里有三个完全不同的区域，也可以通过另外两条路径进入：一条陡峭的路径通向北部和中部区域，另一条不那么长和陡峭的路径通向南部区域。
一些设施受到了明显的印加影响，例如卡兰卡，这是一座长方形的石头建筑，当地人将其用作食物和物资匮乏时期的储存中心，为来自远方的游客提供住宿。仪式中心和神灵崇拜。事实上，关于库拉普的一些数据直到现在还无法绝对确定地解析，例如向该地区转移大量石头或该地区水的转移和分配。
尽管对这些建筑的目的尚未达成共识，但秘鲁考古学家费德里科·考夫曼·多伊格进行的一些研究旨在确定库拉普可能是当地农业生产的行政中心和进行生育仪式的仪式中心。由于其结构设计和通道的复杂性，这个定义与大多数游客对这个地方作为军事堡垒的印象相去甚远。
但正是从考夫曼·多伊格的首次调查以及他让世界认识查查波亚文明重要性的努力中，有关该文化的宝贵证词和重要考古记录才得以恢复。其中值得一提的是 Los Pinchudos、Gran Pajatén（里奥阿比塞奥国家公园）的一系列陵墓、卢亚的 Revash 陵墓以及莱梅班巴 Laguna de Los Cóndores 的无数木乃伊。
几乎在下午快结束的时候，太阳开始悄悄地落到那些绿色的山丘后面，一阵微冷而阴沉的风开始悄悄地袭来，就像一张精致的暮色毯子笼罩在库拉普上空。是时候休息了，我们快速走下楼梯，沿着路返回埃尔廷戈，然后前往查查波亚斯。