El Premio Nobel de Economía, Edmund Phelps, conoce la economía china como ningún otro académico de primer nivel internacional. Aunque mantiene sus actividades en la Universidad de Columbia, Nueva York, donde enseña macroeconomía y dirige el Centro sobre Capitalismo y Sociedad, pasa gran parte del año en China.
Phelps es también decano de la prestigiosa New Huadu Business School, que tiene su sede en Fuzhou, provincia de Fujian, y cuenta con centros de estudios en Beijing, Shanghái y Zúrich, Suiza. En 2014, el gobierno chino le otorgó el Premio a la Amistad, uno de los más altos honores que ofrece el país a un extranjero, galardón que recibió de manos del primer ministro Li Keqiang.
En entrevista exclusiva para Integración & Comercio, el Nobel sostiene que la innovación fue la clave de la dinámica de crecimiento en el gigante asiático, que el modelo debe transformarse para que la inversión siga siendo rentable y que América Latina debería seguir buena parte de la receta china para elevar su productividad.
¿Cuál es su opinión sobre el modelo de crecimiento chino y sus transformaciones?
Creo que el modelo chino se encuentra en un proceso de cambio. El primer ministro Li Keqiang presiona para transformar la economía para que sea altamente innovadora. Por supuesto que este será un camino largo y difícil, pero se han hecho progresos considerables en esa dirección. Esto está siendo pasado por alto por varios comentaristas sobre China. Hay un tremendo espíritu de innovación que se ha extendido a lo largo del país. Especialmente, hay mucha gente joven que está pensando en iniciar startups. Los jóvenes están intrigados y emocionados sobre las posibilidades de crear empresas innovadoras.
¿Cuál es la importancia de la innovación en el desarrollo que tuvo China en la última década?
La innovación es fundamental. Yo mismo estoy impulsando eso. Empecé a involucrarme en 2010, cuando me convertí en decano del New Huadu Business School en Fuzhou. He venido estimulando a los estudiantes para ser intrépidos, enfrentar lo desconocido y emprender un viaje de exploración y creación. He venido haciéndolo desde 2010 y aún lo hago. América Latina también debería intentar reformas que permitan a las empresas innovar con mayor facilidad.
¿Cree que para esto es clave el rol que se asigne a la transferencia de tecnología en los acuerdos comerciales?
No pienso que la transferencia de tecnología sea algo extremadamente difícil. Sucede todo el tiempo en los países europeos y en Estados Unidos. Toda la historia de Occidente en décadas recientes ha sido una historia de convergencia de los niveles de productividad. Tarde o temprano, toda la tecnología se copia. Sin embargo, si uno quiere estar en la frontera, a la cabeza de la manada, entonces es necesario hacer la propia innovación local.
¿Podrá el país mantener tasas altas de crecimiento? Es evidente que en China ha pasado el momento en su desarrollo donde se podía esperar crecer a tasas de dos dígitos, como 12% o 11%. Parece que China debe esperar una tasa de crecimiento mucho menor. Ya se ha sacado provecho a las frutas más bajas que estaban ahí para ser levantadas moviendo la mano de obra desde el oeste, donde tenía cero de productividad, hacia las ciudades de la costa. Esa fue una gran mejora en la eficiencia de la economía. Pero sólo se puede hacer eso una vez. Ahora la mayoría de la mano de obra está en las ciudades, en las fábricas.
Conozco muchas personas que están hablando de transformar a China en una economía de bienes de consumo con énfasis en los servicios. Y por supuesto que eso aumentará el bienestar en China, que tendrá mejores escuelas, mejores hospitales. No obstante, mover recursos del sector de bienes de capital al sector de bienes de consumo no aumentará la tasa de crecimiento. En todo caso, es una receta para un crecimiento más lento. Pero, como decía antes, las oportunidades para enormes ganancias de productividad han sido agotadas.
En este proceso, la inversión se ha encontrado con rendimientos decrecientes y no creo que el surgimiento de un sector de bienes de consumo ofrezca grandes tasas de retorno a la inversión. Por el contrario, en mi opinión, sólo habrá una modesta rentabilidad de la inversión. Es por eso que es muy importante avanzar en la verdadera transformación necesaria: que cada industria sea parte de un sector más innovador.
¿Cómo evalúa la política monetaria del gigante asiático? ¿Cómo puede evolucionar la moneda tras los últimos cambios?
Cuando un mercado de valores cae abruptamente, no es una conclusión obvia que seguirá cayendo. Al menos yo no espero eso. En cuanto a la política monetaria, la tasa de interés es bastante alta para mantener en esos niveles la moneda La oportunidad para enormes ganancias ha sido agotada. Las frutas más bajas del árbol ya fueron cosechadas.